Arrancan las obras de remodelación de la Estación de San Francisco
El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, destacó la acción del Gobierno en el ferrocarril de Ourense, consolidándose como un polo del transporte en España con más de 625 millones de euros invertidos. Pedro Blanco supervisó hoy el comienzo de las obras de remodelación de la Estación de San Francisco para albergar el nuevo Centro de Regulación de la Circulación (CRC). El delegado estuvo acompañado por el alcalde de la ciudad, Gonzalo Pérez Jácome; el subdelegado del Gobierno en la provincia, Eladio Santos, y el subdirector de la Red Noroeste de Adif, Abel Rajo.
Pedro Blanco puso en valor que la obra combina la recuperación del patrimonio ferroviario gallego con la tecnología de última generación para centralizar la gestión de las líneas de Galicia y responder al incremento de tráfico, de manera que “un edificio histórico como este va a volver a operar en la vanguardia del más alto rendimiento a nivel gallego”. El futuro CRC sustituirá y ampliará al actual centro de gestión ferroviaria situado en la Estación de Ourense.
“El Gobierno de España demuestra con hechos e inversión su compromiso con el tren gallego y con la provincia y la ciudad de Ourense, convertida en un gran nodo ferroviario con más de 625 millones del Gobierno”, añadió el delegado. Concretamente, la renovación de la estación de San Francisco y la completa instalación de los sistemas del CRC se cifran en 14,5 millones de euros, mientras que otras obras como la variante de la ciudad alcanza los 500 millones o la estación intermodal asciende hasta los 112 millones de euros.
Gestión de más de 1.150 km de líneas
El futuro CRC gestionará la circulación de trenes a lo largo de 1.151 km de líneas en Galicia, al asumir los tramos Ourense-Santiago de alta velocidad y la línea de ancho métrico Ferrol-Ribadeo. Será, por lo tanto, un centro multired, ya que gestionará los tres anchos métricos que hay actualmente en España.
En el edificio de la antigua estación se va a llevar a cabo un reacondicionamento completo de las estructuras, cubiertas, fachadas y accesos, además de una restauración de todos aquellos elementos arquitectónicos decorativos que lo precisen. Se habilitará un nuevo acceso independiente del uso de la plataforma de la línea de alta velocidad, desde la calle Serra de Queixa, incorporándose las plazas de aparcamiento necesarias para los usuarios del edificio.