El BNG presenta enmiendas al proyecto de Ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones de Ourense
La Xunta de Gobierno Local del Concello de Ourense, en sesión extraordinaria celebrada el pasado día 19 de mayo de 2025, acordó la aprobación del proyecto de Ordenanza municipal reguladora de las Zonas de Bajas Emisiones, abriendo entonces un plazo de 10 días hábiles para que los Grupos municipales presenten las enmiendas que consideren oportunas con el fin de mejorar el texto y antes de someterlo a la aprobación inicial por parte del Pleno.
El Grupo municipal del BNG registró hoy una serie de enmiendas “con el objetivo de mejorar el proyecto de Ordenanza presentado y con el fin, constructivo, de clarificar y definir mejor algunas de las medidas o definiciones propuestas”. Así, la formación nacionalista sostiene que es necesario que, en contra de lo que figura en el proyecto de Ordenanza, el Servicio de la ORA se mantenga activo más allá del 1 de enero de 2026, al entender que “son muchas las calles que quedan fuera del ámbito definido dentro de la ZBE y que a día de hoy cuentan con estacionamiento regulado”.
Luis Seara, portavoz del BNG, entiende que “siendo necesaria una actualización del Servicio para que cumpla su objetivo primordial, que no es otro que garantizar la rotación en los aparcamientos y siguiendo las recomendaciones contenidas en el PMUS de 2019, estamos dispuestos a hablar de su gratuidad porque creemos que es preciso que exista algún mecanismo de control, por lo que no entendemos adecuado derogar dicho Servicio”.
Otra de las enmiendas registradas por los nacionalistas tiene que ver con impedir que, tal y como se propone en la Ordenanza, “pueda otorgarse mediante concesiones demaniales la explotación por parte de empresas privadas de zonas de estacionamiento dentro de la ZBE reservadas para los vehículos de alquiler sin conductor, ya que consideramos que el espacio público no puede privatizarse ni la Ordenanza puede ser un mecanismo de financiación para los aparcamientos privados”.
En el BNG también muestran sus dudas respecto a la nueva denominación que se da a lo que son vías peatonales o al hecho de que de la Ordenanza de tráfico desaparezcan las vías con acceso restringido, cuestión que también fue objeto de enmienda por parte del Grupo municipal nacionalista.
Pero más allá de “cuestiones técnicas”, Luis Seara deja claro que “la movilidad es un elemento central que define el espacio urbano y es un factor determinante en la habitabilidad de las ciudades y en la calidad de vida de la vecindad, teniendo además enormes efectos desde el punto de vista de la sostenibilidad ambiental” y añade, “la posición del BNG respecto a la movilidad ha sido manifestada en múltiples ocasiones y difiere de la determinación de una ZBE específica dentro de las urbes al entender que no es razonable aplicar modelos restrictivos en función de la tipología de vehículos en perímetros determinados”.
Los nacionalistas abogan por “definir el conjunto de la ciudad en toda su extensión como una ZBE, apostando por una reducción general del tráfico de vehículos privados en toda la trama urbana y por la ralentización de su tránsito, con la consecuente reducción de emisiones en lugar de promover solamente la sustitución del parque móvil actual por otro en el que primen los modelos de vehículos eléctricos”.
“Esta es una alternativa que ya se viene desarrollando con éxito acreditado en otros ayuntamientos, notablemente en el de Pontevedra, y que fue aceptada por el MITMA, lo que supone una respuesta integral que permite avanzar hacia una movilidad más sostenible”.
No obstante, desde la formación nacionalista entienden que la determinación de una ZBE en la ciudad de Ourense responde al cumplimiento de una exigencia legal “a la que hay que dar respuesta y en el BNG consideramos que la misma debe ponerse en marcha minimizando al máximo aquellos elementos descritos anteriormente y relativos a la creación de situaciones discriminatorias”.