Unanimidad en el pleno contra los ataques de Pérez Jácome a los medios de comunicación
En el pleno ordinario del Ayuntamiento de Ourense celebrado esta mañana se aprobó por unanimidad una moción presentada por el grupo municipal del PSdeG que defiende la libertad de prensa, el derecho a la información y el respeto institucional hacia los profesionales de la comunicación. “En los últimos años, desde que el alcalde ocupa la silla de autoridad máxima de esta ciudad, estamos acostumbrados a presenciar cómo restringe derechos básicos que los ourensanos y ourensanas ya tenían adquiridos, entre ellos el de acceso a una información plural y libre”, señaló la portavoz socialista, Natalia González.
La edil destacó también que “estamos acostumbrados a que se ampare en la excusa de que algo no es competencia estrictamente municipal para echar por tierra cualquier idea o iniciativa que mejore la vida de todos y todas las que aún resistimos en Ourense”. Reprochó además la frecuente respuesta del gobierno local cuando se escucha que “algo no se puede hacer porque es responsabilidad de la Xunta de Galicia o del Gobierno de Pedro Sánchez”.
Natalia González se refirió directamente a las actuaciones del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, especialmente a su reciente anuncio de limitar a solo cinco minutos el tiempo que los fotógrafos disponen para tomar instantáneas al comienzo de los plenos, subrayando que “para interferir en un derecho que aparece recogido en el artículo 20 de la Constitución Española, que reconoce y protege la libertad de expresión, que todas las personas puedan comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión y que prohíbe la censura previa, para eso sí tiene autoridad Gonzalo Pérez Jácome”.
La moción, que contó con el apoyo de PP y BNG, insta al gobierno municipal a garantizar que todas las comunicaciones institucionales (ruedas de prensa, anuncios, declaraciones, actos y convocatorias) se realicen a través de los canales oficiales del Ayuntamiento de Ourense, con libre acceso de los medios y garantizando siempre la posibilidad de preguntas. También pide al alcalde que respete escrupulosamente la libertad de prensa y el pluralismo informativo, absteniéndose de cualquier comportamiento intimidatorio o despectivo que interfiera en el trabajo de periodistas y fotógrafos.
“Traemos esta moción porque la política y el periodismo que nacen por vocación comparten similitudes con las que no podemos más que sentirnos identificados. Cuando lo que se persigue es proteger y defender la democracia y la libertad con mayúsculas, a veces hay que asumir compromisos que pueden resultar incómodos: preguntar donde no quieren que preguntes, investigar donde muchos preferirían que reinase el silencio y contar lo que otros tratan de ocultar. Defender la libertad de prensa es, en esencia, defender a quien se dedica a buscar y explicar esos hechos incluso en las circunstancias más difíciles”, destacó González.
Además, la moción exige que cualquier comparecencia institucional esté claramente separada de la actividad privada del alcalde como prestador de servicios audiovisuales, para evitar que Auria TV sustituya o condicione la comunicación municipal. También reclaman que Pérez Jácome pida disculpas públicas por su comportamiento y se retracte de las decisiones arbitrarias que limitaron el acceso de los medios y profesionales a los órganos públicos.
En la misma sesión, los grupos de la oposición apoyaron otra iniciativa del PSdeG para promover la cubrición de los parques infantiles y espacios de ocio municipales, una medida que ya funciona con éxito en ciudades como Ferrol, Allariz o Irún. Según la portavoz socialista, “los parques cubiertos, además de proteger de las inclemencias meteorológicas, permiten mejorar la accesibilidad universal y asegurar el disfrute de los espacios públicos por parte de todas las personas”.
En el texto aprobado se recoge la necesidad de realizar un inventario de las zonas de juego infantil que podrían adaptarse para esta medida, y de redactar y contratar el primer parque infantil cubierto de la ciudad en un plazo máximo de un año, preferentemente en un barrio con mayor demanda. Además, instan a abrir un proceso participativo donde familias, AMPAs y asociaciones puedan aportar propuestas sobre localización y diseño.